Los controladores de automatización son fundamentales en el concepto de automatización y hacen que toda la casa funcione automáticamente cuando un controlador inteligente se convierte en el cerebro de la casa inteligente. Los controladores de automatización controlan iluminación, la temperatura, componentes de entretenimiento, el riego y otros sistemas / sensores.
Una vez el sistema está programado, el controlador opera por su cuenta para decidir lo que el hogar debe hacer bajo diversas circunstancias. El usuario puede también controlar manualmente el sistema mediante teclados fáciles de usar y pantallas táctiles, e incluso a través de un smartphone o de Internet. El controlador puede incorporar heurística o lógica difusa para acceder correctamente a todas las entradas e incluso aprender los hábitos de uno para determinar correctamente las acciones que se basan en las entradas del sensor.
Redes domóticas inalámbricas (WHAN - Wireless home automation networks) comprenden sensores y actuadores inalámbricos integrados que posibilitan aplicaciones de seguimiento y control para la comodidad del usuario y la gestión eficiente de la casa. Una WHAN típicamente comprende varios tipos de dispositivos integrados severamente restringidos, que pueden estar alimentados con baterías y equipados con transceptores de radiofrecuencia (RF) de baja potencia. El uso de comunicación RF flexibiliza el añadir o eliminar dispositivos de la red y reduce los costes de instalación ya que las soluciones cableadas requieren conductos o bandejas de cables.
Los controladores más sofisticados pueden incluso conectarse a la nube, proveerse de recursos informáticos, permitir a los usuarios controlarlo todo por voz y proporcionarle respuestas de voz similares a las humanas, parecido a los sistemas Siri o Cortana proporcionados por Apple y Microsoft, respectivamente, ambos disponibles aún hoy en día vía una interfaz de programación de aplicaciones (API).