3 Arquitectura de red
3.2 Arquitecturas

Existen dos modos para configurar la arquitectura de una red inalámbrica: ad hoc e infraestructura [1-2]. En el modo ad hoc, los dispositivos transmiten directamente punto a punto, mientras que en el modo infraestructura, los dispositivos se comunican a través de un punto de acceso que sirve de puente a otras redes.

Modo Ad hoc

Cuando se utiliza el modo ad hoc, todos los dispositivos de la red inalámbrica se comunican directamente entre sí, de igual a igual, en el modo de comunicación punto a punto. La red no tiene ninguna estructura o puntos fijos. No se requiere ningún punto de acceso para la comunicación entre dispositivos.

El modo ad hoc es el más adecuado para un pequeño grupo de dispositivos que se encuentren presentes físicamente en estrecha proximidad entre sí. El rendimiento de la red sufre si el número de dispositivos aumenta. En este modo, las desconexiones al azar de dispositivos pueden ocurrir con frecuencia y, también, la gestión de la red puede resultar una tarea difícil para su. El modo ad hoc tiene otra limitación y es sin la instalación de pasarelas especiales, las redes en modo ad hoc no pueden conectarse con una red de área local cableada y en consecuencia no puede acceder a Internet.

Sin embargo, el modo ad hoc funciona bien en un entorno pequeño siendo la forma más fácil y menos costosa de configurar una red inalámbrica.

Modo Infraestructura

La otra arquitectura de red inalámbrica es el modo de infraestructura. En este modo, todos los dispositivos están conectados a la red inalámbrica con la ayuda de un punto de acceso (AP). Los puntos de acceso inalámbricos son generalmente routers o switches que pasan los datos de la red inalámbrica a datos en una Ethernet cableada, actuando como un puente entre la LAN cableada y los dispositivos inalámbricos. La conexión de varios puntos de acceso a través de una red troncal Ethernet por cable puede extender aún más la cobertura de la red inalámbrica permitiendo que un dispositivo móvil se salga fuera del rango de cobertura de un punto de acceso y entre en el rango de otro. Consecuentemente, los clientes inalámbricos pueden moverse libremente del dominio de un punto de acceso a otro y seguir manteniendo la conexión de red sin cortes.

El modo de infraestructura ofrece una mayor seguridad, facilidad de gestión, y mucha más escalabilidad y estabilidad. Sin embargo, el modo de infraestructura incurre en un costo adicional debido al despliegue de puntos de acceso.

Identificador del Conjunto de Servicios Extendidos (ESSID)

El identificador del conjunto de servicios extendidos (ESSID) es uno de los dos tipos de identificadores del conjunto de servicios (SSID). En una red inalámbrica ad hoc sin puntos de acceso se utiliza el identificador del conjunto de servicios básicos (BSSID). En una red inalámbrica de infraestructura, que incluye un punto de acceso, se utiliza el ESSID aunque a menudo se refiere al mismo como SSID.

El identificador del conjunto de servicios (service set identifier - SSID) es una clave alfanumérica de hasta un máximo de 32 caracteres que identifica a una red inalámbrica de área local.

Algunos vendedores se refieren a la SSID como el nombre de la red. Para que los dispositivos inalámbricos en una red puedan comunicarse entre sí, es necesario que todos ellos se configuraren con el mismo SSID.