Algunos sistemas no parecen presentar ninguna dinámica intrínseca, los llamamos sistemas estáticos o sistemas sin dinámica. Por ejemplo, un amplificador o transductor. Mirando de cerca, podemos ver que estos sistemas presentan también cierta dinámica, y los cambios de valor presentan respuestas transitorias. Estos transitorios, sin embargo, puede ser inapreciables para nosotros (por ejemplo, la iluminación de una bombilla, el cambio de un contacto o termostato, línea de desplazamiento del puntero, eléctrico o neumático motor en marcha o parado).
A veces, el transitorio es evidente, pero para un propósito en particular su dinámica no es significativa, y puede ser despreciado. Por ejemplo, el proceso de apertura o cierre de la válvula del calentador o la sedimentación de valor termómetro no es significativo en el control de la temperatura, que es un proceso sustancialmente más lento. Para un control lógico del manipulador, nos preocupamos de una trayectoria, la velocidad y el final del movimiento, pero la aceleración y la dinámica de desaceleración están fuera de nuestro interés. Del mismo modo, en la programación de mecanizado de control numérico, nos preocupan la trayectoria y la velocidad a lo largo del camino y esperamos que los servomotores de apoyo deslizantes funcionen bastante bien. Por otro lado, un técnico tiene para poner a punto la dinámica de los servomotores. Como los pasajeros de un ascensor, sentimos claramente la dinámica del sistema, pero como programadores de controladores lógicos, no lo tenemos en cuenta - lo dejamos para los constructores y personal de mantenimiento.