La televisión analógica (ATV) transmite una señal analógica cuyos valores de amplitud varían en un intervalo continuo. Esta señal transporta la señal de audio (sonido), la señal de vídeo (información sobre el brillo y el color de la imagen) y la información de sincronización (horizontal, vertical). La señal de audio es modulada usando modulación de frecuencia y la señal de vídeo se transmite utilizando la modulación de amplitud todo ello dentro del ancho de banda de un canal, es decir, una cadena de TV ocupa todo el ancho de banda disponible para una frecuencia de canal.
La naturaleza analógica de la señal transmitida hace que la televisión analógica por lo general ofrezca una menor calidad de imagen. La señal analógica está sujeta a interferencias y ruidos durante la transmisión (principios físicos de la propagación de señal, reflexiones, clima) lo que resulta en una imagen final nevada (ruido, granularidad) y con dobles imágenes (ghosting). Con el aumento de la distancia entre la antena de usuario y el transmisor, la señal analógica disminuye su intensidad y no puede ser completamente regenerada.
La televisión digital (DTV) transmite señal digital. Debido a que las señales de audio y vídeo de origen son señales analógicas éstas deben ser primero digitalizadas, es decir, convertidas en una serie de 0s y 1s. Como se menciona en la siguiente sección, las señales digitalizadas tienen que ser comprimidas y luego combinadas para formar una señal de transporte (stream) que se ajuste para su radiodifusión.
Las señales de DTV están protegidas por códigos de corrección de errores que permiten regenerar la señal original y eliminar el ruido y las interferencias [1]. Por lo tanto los usuarios pueden ver canales de TV (imagen y sonido) en la misma calidad como fueron transmitidos (sin ghosting). Esta tecnología proporciona a los usuarios con imágenes en definición estándar (SD) y en alta definición (HD) y sonido de calidad CD (Compact Disc). La televisión digital puede utilizar el ancho de banda de un canal de manera más eficaz. Los algoritmos de compresión (y multiplexación) permiten a los operadores insertar más canales de televisión (así como de radio) dentro del mismo ancho de banda previamente ocupado por un canal de televisión analógica. La televisión digital ofrece una gran cantidad de innovaciones con un nuevo modelo de operación que contribuye significativamente a la convergencia de ordenadores, televisión e Internet. Los beneficios para los usuarios son notables, cientos de canales de televisión y acceso a una amplia gama de nuevos servicios.
DTV y ATV pueden utilizar el mismo medio para la radiodifusión (cable, aire y por satélite). Pueden compartir la misma banda de frecuencia, pero no las mismas frecuencias al mismo tiempo. DTV no es compatible con ATV. Los usuarios tienen que comprar un decodificador digital (STB – set-top-box) [3]. La figura 2 muestra cómo la calidad de imagen se comporta en base a la intensidad de la señal. Sencillamente, la imagen digital se ve en calidad perfecta o no hay imagen. Existe un gran intervalo de tiempo en que la imagen digital permanece en perfecta calidad de imagen, mientras que la televisión analógica se está convirtiendo en cada vez más granulada y/o con ghosting.