Junto con las femtoceldas, en redes 4G están definidas las estaciones repetidoras llamadas “relays”. En general, los relays son nodos eNodeB simplificados (y por lo tanto de bajo coste) que transmiten datos desde el eNodeB al usuario. El intercambio de datos entre el UE y la red se encamina a través de uno o varios relays.
Cada parte de la comunicación (por ejemplo, desde el UE hasta el relay, desde el relay al eNodeB, etc.) se conoce como un salto en la comunicación. Por lo tanto, la comunicación mediante relays también se conoce como comunicación multisalto.
Los relays se pueden utilizar para ampliar la cobertura de un eNodeB o para aumentar el rendimiento en el área específica, como se muestra en la figura 27. Para aumentar el rendimiento, se despliega un relay dentro del área de cobertura del eNodeB. El rendimiento mejora cuando se reduce la distancia entre nodos de comunicación y de esta forma el nivel de la señal que recibe el nodo de destino o UE aumenta. Para ampliar la cobertura, el relay se ubica cerca del límite del área de cobertura de la celda a la que da servicio un eNodeB.
A diferencia de las femtoceldas, se espera que los relays estén totalmente controlado por los operadores y que su conexión a la red sea a través de un enlace inalámbrico compartido con las conexiones de datos de usuarios servidos por el eNodeB.
Los relays se pueden clasificar atendiendo a su movilidad en: