Las tecnologías de almacenamiento de energía y de potencia son claves para el despliegue de aplicaciones de la IoT. Las cuestiones energéticas, en todas sus fases, desde la generación hasta la conservación y el uso, son fundamentales para el desarrollo de la IoT. Estas tecnologías tienen que ofrecer generación de energía de alta densidad de potencia y soluciones de generación, que, cuando se usen con una nanoelectrónica actual de baja potencia, nos permitirá diseñar el dispositivo de identificación autoalimentado basado en sensores inteligentes inalámbricos. Todavía hay una necesidad de investigar y desarrollar soluciones en esta área (nanoelectrónica, semiconductores, tecnología de sensores, integración de micro sistemas) que tienen como objetivo dispositivos más eficientes y compactos de ultra bajo consumo de energía y de almacenamiento de energía como baterías, pilas de combustible, y baterías de polímero / impresas, ya que los dispositivos actuales parecen insuficientes teniendo en cuenta la potencia de procesado necesaria y las limitaciones de energía del futuro. Además, la integración de sistemas aumentará la eficiencia de los sistemas actuales y proporcionará varias soluciones para las necesidades futuras.